Friday, February 23, 2007

Su presencia

Ha estado ahí desde que nací. Siempre siguiéndome, siempre atenta a lo que hago, a lo que dejo de hacer, a cada movimiento, a cada pensamiento, a cada omisión, a cada silencio. Siempre ahí esperando que se acabe el tiempo de las sombras para aparecer como una espía.
Su presencia me ha afectado desde que nací, desde el primer día. Me afecto desde el momento que me parieron, así paso desde el primer día.
Todos me creen loco, pero, se bien que me vigila, que soy su obsesión, su hijo, su lindura, su "te protejo", "mi lindo", soy suyo y me niego a serlo, pero por mas que me niegue, mi rebelión no alcanza para una revolución, vamos no alcanza para un motín de barco pequeño.
Aquí dentro de mi cuarto, aquí dentro de mi me he dedicado a analizar la composición molecular del agua... increíble su presencia altera la composición... pero nadie cree, he enviado mis estudios a varias universidades, a varias revistas científicas, pocos me contestan, esos pocos me hacen mas daño que quienes me ignoran. "Estimado Doctor Rediezma. Aunque su estudio es de suma importancia para la Universidad Nacional, no encontramos datos concretos que puedan apoyar sus descubrimientos. Al carecer del estricto valor científico con el cual valoramos los avances de la ciencia del país, nos vemos en la necesidad de negarle los apoyos económicos, para que usted pueda avanzar en su investigación. Esperamos su comprensión y lo invitamos a no dejar de lado sus investigaciones y hacernos saber a la brevedad, cuando pueda demostrar de forma contundente sus afirmaciones, bla, bla, bla, Atete XXXX", en pocas palabras, ¿son fantasías mis investigaciones?, todo indica que si, que no tengo nada científico en mi cerebro. Este cerebro que se quiebra, que se satura, que se frena, que se embota ante su presencia.
Cuando esta que es casi todos los días, cierro mi puerta con llave y candado, la chapa es la cerradura de una muralla, la puerta ahora es metálica para impedir que me escape. Su presencia me afecta, me altera, cuando la empiezo a sentir me siento en uno de los rincones de mi habitación, abrazo mis rodillas con mis brazos, las aprieto fuerte hacia mi, cierro los ojos, mi cuerpo tiembla, mi mirada se nubla, me cuesta trabajo respirar, mi ritmo cardiaco se acelera, mis miembros se contraen, se ponen rígidos, me sofoco, creo que me convulsiono, llega el momento en que pierdo el conocimiento, despierto agotado, con hematomas, con rastros de sangre en mis ropas, me duele la espalda, los brazos, las piernas, los ojos, los párpado, las rodillas, la mandíbula... mi ropa se empapa creo yo de sudor.
Al despertar retomo mis investigaciones, analizo los restos de mi sangre, separa el agua de la química sanguíneas, y ahí, ahí esta el cambio molecular, si pinche mi dedo en ese momento, el agua de la química sanguínea de mi cuerpo es diametralmente opuesta.
Han pasado años así, me analizo, me estudio soy uno sin su presencia, soy otro ante su presencia, y la espero, como niño que espera la noche de navidad, ahí, nervioso, ahí sin moverme... y al primer rayo de la luna todo empieza.

Labels: